La vida al igual que el duelo no es una carrera de velocidad sino de resistencia. Para llegar más lejos y en mejor forma es necesario aprender a mantener el equilibrio
Cada actividad que se realiza, pone al doliente en contacto con la dura realidad, porque falta alguien. No se entiende como la vida de las otras personas puede seguir como si nada mientras uno está roto.
Ahora toca soltar las notas que desentonaron, conservar las notas que dan paz y dulzura a nuestra alma, para continuar ésta melodía que manifiesta la historia de nuestra vida.